lunes, 23 de julio de 2018

LA SENDA DE CAMILLE... ¡¡¡ MEJOR IMPOSIBLE!!!

La Senda de Camille es mucho más que una ruta por montaña, pues debe su existencia a la conmovedora historia de un oso del mismo nombre al que nunca olvidaremos por haber sido el último oso pirenaico que vivió en la cordillera. Lamentablemente, parece que en 2010, con unos 25 años, su aventura terminó, pero nos queda la certeza de que hasta que llegó su momento, vivió en unos parajes espectaculares, entre el valle francés del Bearn, el valle navarro de Roncal y los valles de Ansó y Echo en Aragón.
El caso es que un día, deambulando por el monte con mi compi de fatigas, Pilar Crespo, decidimos rendir homenaje a Camille como más nos gusta: corriendo, que andando íbamos a tardar mucho... jajajajajaja... Como no queríamos que fuese una de esas promesas a las que se las lleva el viento, (ninguno de los dos somos de esos), pusimos fecha y empezamos a preparar todo para seguir el rastro de Camille. Iban a ser 106 km con 6.000 D+. ¿Que cuánto nos llevaría? Nos daba exactamente igual, porque lo único que queríamos era disfrutar. Y así disfrutamos nosotros...qué le vamos a hacer.

Unos meses después llegó el día señalado. En todo ese tiempo nuestra voluntad aún seguía firme, no había excusas. Todo preparado: equipo, ruta cargada en gps (y mapa porque todas las precauciones son pocas), cartillas y sobre todo las ganas de empezar.

00:00 del viernes. Salimos del Refugio de Lizara, donde como siempre el trato fue inmejorable. Un café bien cargado y a por la primera etapa: Lizara-Somport. La niebla se presentó desde el primer momento. Bendito GPS. Seguimos decididos.

Y primera etapa completada, eso sí, con una hora extra de camino porque la niebla insistía en acompañarnos. El GPS de Pilar echaba humo.

Y seguimos hacia el Refugio de Arlet, segunda etapa de la Senda. ¡Y que no se va la niebla! Si fuese un vecino molesto al que pudiera echar, ya le había dicho yo cuatro palabritas...Pero así es la montaña, así que tendremos que conformarnos y seguir. Estamos empapados de pies a cabeza. No importa. Adelante.

Y después de 9 horas sin parar desde Lizara, como en un cuento de hadas, aparece ante nuestros ojos el Refugio de Arlet. ¡Milagro! Decidimos que nos habíamos ganado tomar un cafelito para entrar en calor. Tampoco convenía relajarse, así que, después de 20 min seguimos dándole "chof" "chof" zapatilla a la Senda. Eso sí, felices en todo momento.

Pasamos por Col de Saoubathou, Puerto del Palo, Labrenère hasta llegar a Lescun. Pudimos ver el homenaje a "Le chemin de la Liberté", pero nada más...en fin. Debíamos de ser una grata compañía para la niebla, porque seguía con nosotros. Si al menos tuviese una buena conversación...

Ya en Lescun, decidimos seguir del tirón porque el camping donde teníamos que sellar estaba de reformas. Menos mal que Xaro ya nos había prevenido. Gracias Xaro.
Vamos directos hacia el collado del Petrechema, en busca del famoso sol del que tanto presumimos en España.

En el collado del Petrechema, lo mismo de lo mismo, niebla, niebla y más niebla. Deseando poner el pie en nuestra soleada España. Siendo honestos, llegado este punto ya estábamos bastante cansados de no poder ver nada y de ir mojados todo el rato. Aún así seguimos disfrutando de la aventura.

¡Españaaaaaa!!! Parece que nuestras plegarias fueron escuchadas porque llegando al Refugio de Linza, ¡¡¡¡EL SOOOOOOOOOL!!!!... ¡Qué ilusión!, después de unas 17 horas, vemos la luz. Y como no hay nada más español que un huevo frito, nos miramos y... ¿¿¡¡¡Unos huevo fritos!!!?? ¡Yuhuuuuu! Esto hay que celebrarlo, que sólo hemos hecho una parada para repostar en Arlet desde que salimos de Lizara.

La imagen lo dice todo, poco hay que contar. Esta vez nos permitimos el lujo de tomarnos casi una hora de descanso bien merecido. Nos ponemos la ropa seca de repuesto que llevamos y nos decidimos a hacer los últimos 32 km para terminar la Senda de Camille. Esto ya está chupado... ¡Vamoooooooooooooos! Decididos, nos ponemos la mochilas, y a correr de nuevo hasta el camping de Zuriza. Desde ahí por la pista de Taxeras hacia el collado de Achar...¡Corre Pilar, corre, que la niebla no nos sigue!

Pero a los pies del collado de Achar, nuestro gozo en un pozo. La niebla parece que sólo se había ido para venir con refuerzos: esta vez estaba acompañada de viento y aguanieve. Lejos de sentirnos vencidos por ella, y viendo lo terca que era, tomamos la decisión de cortar aquí.  Habíamos hecho 82 km en menos de 19 horas, lo que creo que en esas circunstancias ya era todo un logro. Además el universo nos envió una nueva señal en forma de pastor, que nos aconsejó que no siguiésemos porque el tema estaba feo. Como no podía ser de otra manera, le hicimos caso. Además, gracias a él, llegamos a Lizara, donde el aguanieve estaba presente. No cabía duda de que habíamos tomado la decisión acertada. Y es que con la montaña no se juega, porque luego pasa lo que pasa.
EN BREVE VOLVEREMOS A POR ELLO DESDE EL PRINCIPIO, A POR ESOS 106 KM.

Quiero dar las gracias a Pilar, por ser una compañera imparable, por saber gestionar cuándo correr y cuándo trotar, por aguantar en todo momento sin descanso y siempre con la sonrisa puesta... La verdad es que imposible mejor. Cuando yo flaqueaba, ella tiraba de mí y a la inversa... Sólo puedo decir de ella: UNA FUERZA Y UNA CABEZA de 10 sobre 10.

Gracias también al Refugio de Lizara (Jorge, Xaro y todo el equipo) por ponernos todo tan fácil y tratarnos mejor que al rey. Sin ellos, imposible.

Gracias siempre a mi Espi, que nos iba siguiendo en todo momento y animando en cada etapa. Ella era nuestros ojos de día y de noche. Siempre alerta por nuestra seguridad.

ESTO NO ACABA AQUÍ, ¿verdad Pilar?

jueves, 19 de julio de 2018

RETO 2KV COLLARADA: ¡¡¡CONSEGUIDO!!!

Como cada año, llega la "2KV Collarada", la carrera entre las carreras, el único 2KV de
España con 8,5 km y 2016 D+. Este año lo que quería, aparte de disfrutarlo, era bajar de 3 horas, puesto que el año pasado me salieron 3:00:53 seg. quedándome a escasos segundos de conseguirlo. En fin, que este año ¡¡¡¡¡¡LO CONSEGUIIIIIIIIIII!!!!!!! Qué bueno: 2:51 min. Una pasada poder seguir cumpliendo sueños y sobre todo, poder disfrutarlos. Gracias a Villanúa y la organización del 2KV por este reto tan increíble.

Equipo preparado. Reto: bajar de 3 horas... Cartel especialmente bonito este año. ¿Por qué será?

Dorsal nº 22, los dos patitos jejejejeje...Como siempre, lo mejor, la gente que ronda por estas carreras. Grandes todos, buena gente de las de verdad.

En fin... 8:00 am... vamos a por la cima de esa Collarada tan mágica, vamos a por esos 8,5 kms con 2016 D+ en menos de 3 horas. ¡¡¡Go go to piki power!!!

Subida perfectamente gestionada. Pasada la Trapa, voy ya a por los últimos 1.000 positivos, donde me encuentro a Ramón Ferrer. ¡Qué  GRANDE es el jodío!

Llegando ya a la cima de la Collarada. De repente oigo a Pilar HELSE y al Pollo dando ánimos como energúmenos. Justo el empujón que necesitaba para llegar a la cima en 1:50 min ¡¡¡BRUTAL!!!

Una vez en la cima, a 200 pulsaciones, intento beber un poco... Jajajajaja... beso a Pilar...

... y a bajar volando hasta Villanúa.

Bajada súper rápida. La verdad es que me encendí y en 20 min estaba en la Trapa de nuevo. Y aquí Mr. Ramón Ferrer con su cámara retrata el momento de nuevo. Como siempre 1.000 gracias Titan-lux.

Y simplemente: RETO CONSEGUIDO. 2.51 min; 21º de la general y 4º de mi categoría. Qué bueno, qué pasada, qué genial... #aputotopesiempre

No tengo palabras de agradecimiento a cada uno de los que me fueron dando ánimos: Pilar y el Pollo, que me esperaron en la cima (por no decir que para eso antes tuvieron que llegar hasta allí...); Joserra, que con su abrazo siempre me da fuerza para bajar a lo loco, un clásico de cada año; Ramón Ferrer que siempre está con el dedo en la cámara; Jorge Galve que estaba, como siempre en los tramos más complicados para asegurarnos a todos el paso, grande, muy grande...  y a Eva Puig, que últimamente siempre me espera en meta.
Gracias 1.000 a todos los voluntarios y la organización de este pedazo carrera. Anchel, creo que tenemos una cena pendiente. Tus presagios se han cumplido. Gracias mil a todooooooooooos. Gracias a mi padre, que cada día me exige más hasta que llegue el primero en una carrera... jajajajajaja...

Pero en especial a mi Espi, que es mi verdadera fuerza en cada carrera, mi verdadera recompensa. Ella es la que me da tanta fuerza y tanto ánimo para seguir haciendo lo que más me gusta.

MAMÁ, estés donde estés siempre juntos... Siempre te llevo dentro de mi corazón. Seguiré corriendo cada día hasta lo más alto para seguir sintiéndote muy cerca de mí.

miércoles, 4 de julio de 2018

BOCA DEL INFIERNO, ¿QUIÉN DIJO MIEDO?

Hay carreras y carreras, pero la Boca del Infierno nunca decepciona. Carrera con una organización y unos voluntarios de lujo. Carrera rápida, con subidas y bajadas repletas de hayas y con un descenso desde el refugio de Gabardito más que bonito. Una calzada romana bien soleada, anunciaba que ya quedaba poco para llegar a meta, en la Selva de Oza. La verdad es que es de las carreras que considero de las mejores por su belleza y todo lo que la hace tan especial. En fin, que de nuevo a lío y a correr para variar.

Equipo, perfil y dorsal preparado... De nuevo a disfrutar de una gran carrera por la Selva de Oza.

Gente maravillosa, que con la excusa de correr, coincidimos muchos fines de semana para seguir dándole a la zapatilla. Empieza el rock&run.

Después de unos kilómetros corriendo, llegamos al barranco de los Jardines. Hay que cruzarlo con "cuidadín" si no queremos caernos al agua.

El calor aprieta, pero gracias a lo frondoso del recorrido, la sombra nos acompaña gran parte del tiempo.

En el último tramo, la famosa calzada romana, se convierte en un desierto de sol constante. Solo pensaba en beber... qué durilla se hizo, la verdad.

Y de nuevo, llegando a Selva de Oza... últimos 300 m para pasar por debajo del arco de meta y haber disfrutado de otra carrera para la saca terminando feliz de poder serguir disfrutando como un enano.

Y reto conseguido. Todo consistía en bajar de 3 horas, y lo logré. 2:57 min me costó llegar a meta. Además llegando el 10º de mi categoría más feliz que una perdiz.

Gracias 1.000 siempre a mi Espi, que no pudo estar en esta carrera y a la que eché muuuuuucho de menos.

Gracias a Athenea Fisioterapia por cuidar de mis piernecicas y hacerlas volar.

MAMÁ, estés donde estés siempre juntos... Siempre te llevo dentro de mi corazón. Seguiré corriendo cada día hasta lo más alto para seguir sintiéndote muy cerca de mí.